Sxxi.net-Cancilleria-wwf. Colombia, uno de los países más biodiversos del planeta, será la sede de la COP16, la Cumbre sobre Biodiversidad más importante a nivel mundial, que reunirá líderes, expertos y tomadores de decisiones a nivel global para intercambiar experiencias y definir metas conjuntas para proteger la biodiversidad.
Esta es la primera vez que Colombia será la sede de esta Cumbre en la que los gobiernos revisarán el estado de la implementación del Marco Mundial de Biodiversidad Global Kunming-Montreal, adoptado en la COP15, en diciembre de 2022, en el cual se propone detener y revertir la pérdida de la naturaleza, que amenaza la supervivencia de más un millón de especies en todo el mundo.
El anuncio de Colombia como sede oficial de la Cumbre de Biodiversidad es un reconocimiento al liderazgo del Gobierno del Presidente Petro en el trabajo de la preservación y conservación de la biodiversidad.
“Esta es una oportunidad histórica para Colombia. Nuestro país tiene el 10% de la biodiversidad de todo el mundo, por eso recibir la COP16 será una ventana para visibilizar el trabajo que hacemos para proteger la naturaleza, pero, además, será un espacio para impulsar, desde Colombia, la agenda climática que permitirá cumplir los objetivos propuestos en el Marco Mundial de Biodiversidad”, destacó Constanza Bejarano, Directora de Asuntos Económicos, Sociales y Ambientales del Ministerio de Relaciones Exteriores.
David Cooper, secretario Ejecutivo Interino de la Convención, afirmó que, “El Secretariado se complace en tener al Gobierno de Colombia como anfitrión de la COP 16. Colombia alberga una biodiversidad tremenda, es un ejemplo inspirador de cómo interactuar con los pueblos indígenas y las comunidades locales, y está a la vanguardia de la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad”.
Susana Muhamad, ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia también destacó que, “esta será una gran oportunidad para una de las naciones más biodiversas del mundo. Es el compromiso del presidente Gustavo Petro y de todo el país, por preservar nuestro planeta, así como enviar un mensaje desde América Latina sobre la importancia de la acción climática y la protección de la vida”.
El Marco Mundial de Biodiversidad Global Kunming-Montreal propone cuatro objetivos, centrados en la salud de los ecosistemas y las especies, que deben alcanzarse para 2050. En la COP16, que se realizará en Colombia entre el 21 de octubre y el 01 de noviembre de 2024, los países participantes trabajarán en el diseño de acciones que permitan la detención de la extinción de las especies y el uso sostenible de la biodiversidad.
Lo que viene de la COP 15
La Directora Ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Inger Andersen, destacó que el aspecto clave ahora en adelante es la implementación: “El éxito se medirá en términos de nuestro progreso rápido y consistente en la implementación de lo que hemos acordado. Todo el sistema de las Naciones Unidas está orientado a apoyar su implementación para que podamos realmente hacer las paces con la naturaleza”.
Asimismo, el Marco Kunming-Montreal cuenta con 23 metas de actuación que deben tomarse inmediatamente y completarse para 2030. Entre ellas figuran:
- Conservar y gestionar de manera eficaz al menos el 30% de las zonas terrestres, de aguas continentales y costeras y marinas. En la actualidad, el 17% de las zonas terrestres y el 8%* de las zonas marinas han sido declaradas áreas protegidas
- Restaurar de manera efectiva el 30% de los ecosistemas terrestres, costeros, marinos y de aguas continentales
- Acercar a cero la pérdida de superficies de suma importancia para la biodiversidad, incluidos los ecosistemas de gran integridad ecológica
- Reducir a la mitad los desechos de alimentos en el mundo
- Eliminar gradualmente o reformar los incentivos perjudiciales para la biodiversidad en al menos US$ 500.000 millones por año, al tiempo que aumentan los incentivos positivos para la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad
- Movilizar al menos US$ 200.000 millones anuales de fuentes públicas y privadas para la financiación de la ejecución de planes y estrategias relativas a la biodiversidad
- Aumentar el total de flujos financieros internacionales procedentes de los países desarrollados hacia los países en desarrollo a por lo menos US$ 30.000 millones cada año
- Velar por que las empresas transnacionales y las instituciones financieras controlen, evalúen y difundan con transparencia y regularidad sus riesgos y efectos en la biodiversidad, junto con sus operaciones, sus cadenas de suministro y de valor y sus carteras
¿Qué es la COP16 de biodiversidad?
La Conferencia de las Partes (COP) es el espacio de discusión y negociación más importante del Convenio sobre la Diversidad (CDB) Biológica de las Naciones Unidas. Durante esta reunión se espera que los países discutan aspectos sobre la conservación de la diversidad biológica, el uso sostenible de sus componentes y el reparto justo y equitativo de los beneficios derivados de la utilización de los recursos genéticos. La COP acapara buena parte de la atención política, por el tipo de decisiones que se toman allí, para buscar soluciones a problemas críticos de nuestro planeta con el fin de detener y revertir la pérdida de naturaleza para el 2030
A diferencia de la COP de Cambio Climático que se lleva cabo anualmente, la de biodiversidad se desarrolla cada dos años. En cada una de estas Conferencias se busca tomar medidas determinantes. Por ejemplo, en 2010, durante la COP10 que se llevó a cabo en la provincia de Aichi, Japón, fue acogido el Plan Estratégico para la Diversidad Biológica 2011 – 2020 y las Metas Aichi, con el objetivo de detener la pérdida de diversidad biológica y asegurar que los ecosistemas siguieran suministrando servicios esenciales.
Las 20 metas Aichi, agrupadas en cinco objetivos estratégicos, fueron, en su momento la hoja de ruta para conservar la biodiversidad global en una década. Sin embargo, durante la COP14, en Egipto, estas fueron revisadas, y los países reconocieron que no alcanzarían a cumplirlas. Fue así como durante la COP15, en diciembre de 2022, fue acogido el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal, la nueva hoja de ruta para detener y revertir la pérdida de biodiversidad a nivel global.
En total, el Marco contiene 23 metas con una proyección para su cumplimiento total a 2030. Las metas incluyen elementos clave, como conservar el 30 % de la tierra y el 30 % de los océanos del mundo para 2030, reducir el impacto de las especies invasoras, reducir los pesticidas, gestionar la agricultura de forma sostenible y dar prioridad a la participación de los pueblos indígenas y las comunidades locales de diferentes maneras.
Estas metas tendrán su primera evaluación en la COP16, de la que Colombia es anfitriona. Dentro de las expectativas para el evento estará la revisión de la actualización de las Estrategias Nacionales y Planes de Acción en Biodiversidad (NBSAPs, por sus siglas en ingles), que son los instrumentos que los países llevan a cabo para planificar la implementación del Marco.
La expectativa para Colombia, por ser el país anfitrión, es alta. Se espera que durante la Conferencia el Gobierno presente sus avances, e inste a los demás asistentes a asumir compromisos cada vez más ambiciosos en materia de biodiversidad.
Estos serán los retos ambientales para Colombia en el 2024
Nuestro planeta enfrenta múltiples crisis, que deben ser atendidas de manera urgente por todas las personas. El cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la contaminación, la degradación de los ecosistemas y la escasez de alimentos son solo algunos de nuestros desafíos como especie.
El 2024 será clave para fortalecer la implementación de nuestros compromisos ambientales y consolidar otros con avances que requieren acciones más decididas por los gobiernos, los tomadores de decisión y la sociedad en general.
Colombia, al ser sede de la conferencia global sobre biodiversidad más importante, la COP16 del Convenio de Diversidad Biológica, tendrá un rol central en la política ambiental internacional y regional. Un rol en el que la paz con la naturaleza y el nexo entre cambio climático y biodiversidad, desde un enfoque de justicia ambiental, serán los ejes centrales.
Esta oportunidad no solo reconoce el liderazgo del país y los logros alcanzados hasta el momento, sino que también es un hito en una ruta más amplia que dirigirá la atención hacia América Latina y el Caribe, hasta la COP30 en Brasil.
Colombia, sede de la COP16 de biodiversidad
Entre el 21 de octubre y el 1 de noviembre se llevará la COP16 del Convenio sobre la Diversidad Biológica en Colombia, la primera COP sobre biodiversidad tras la adopción, por 196 países a finales del 2022 del Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal, para detener y revertir la pérdida de biodiversidad en 2030.
La COP 16, que tendrá como lema ‘Paz con la Naturaleza’, será un espacio fundamental para que los países revisen el estado de la implementación y la alineación de sus Estrategias Nacionales de Biodiversidad y Planes de Acción (NBSAPs, por sus siglas en inglés) con el Marco Global de Biodiversidad.
Entre otras tareas, durante la Conferencia se desarrollará aún más el marco de monitoreo, se avanzará en la movilización de recursos y se finalizará y operacionalizará el mecanismo multilateral sobre la participación justa y equitativa de los beneficios derivados de la utilización de recursos genéticos. Temas como las soluciones basadas en la naturaleza (SbN), los sistemas alimentarios, los modelos de financiación y la protección de ecosistemas estratégicos (océanos, Amazonía, entre otros) serán centrales en la discusión.
2. Río Atrato, sujeto de derechos
Fotografía: Expedición Antioquia 2023 – Ciénaga Palomar
En el 2016, la Corte Constitucional declaró como sujeto de derechos al río Atrato, mediante la Sentencia T-622, un hito en materia de la protección ambiental en Colombia, pues con la medida se busca garantizar la salud de este ecosistema, fuertemente amenazado por actividades como la minería ilegal, y de las personas que habitan en sus cercanías desde un enfoque biocultural. Es decir, reconociendo las relaciones, saberes y conocimientos que tienen las comunidades con la naturaleza.
A ocho años de la sentencia, que establece “al río Atrato, su cuenca y afluentes como una entidad sujeta de derechos a la protección, conservación, mantenimiento y restauración a cargo del Estado y las comunidades étnicas”, su implementación aún tiene enormes retos. Es fundamental que este proceso se adelante de manera efectiva y participativa por el bienestar de esta importante cuenca hídrica y sus comunidades.
3. Implementación del Acuerdo de Escazú
Colombia es el país más peligroso para las personas defensoras de derechos humanos en asuntos ambientales. De acuerdo con el más reciente informe de Global Witness, publicado en septiembre del año pasado, en 2022 hubo 60 asesinatos de defensores ambientales, casi el doble que en el año inmediatamente anterior.
Precisamente, el primer tratado que reconoce los derechos de las personas defensoras del ambiente, conocido comúnmente como el Acuerdo de Escazú, está a punto de ser ratificado por Colombia. Fue aprobado por el Congreso en octubre de 2022 después de largos debates y en este momento se encuentra en la última fase: la revisión de la Corte Constitucional.
Debido a la importancia y la utilidad del Acuerdo de Escazú para la democracia ambiental y la protección de las personas defensoras del ambiente, varias instituciones y ONG ya están realizando acciones orientadas a su implementación.
4. Frenar la contaminación por plásticos
Este 2024 se cumplirán las dos últimas reuniones del Comité Intergubernamental de Negociación (INC, por sus siglas en inglés) sobre la Contaminación por Plásticos. INC-4 e INC-5, como se les conoce oficialmente a estas reuniones, tendrán lugar en Ottawa (Canadá) entre el 23 y el 29 de abril, y en Busan (Corea del Sur) del 25 de noviembre al 1 de diciembre, respectivamente.
La expectativa en Colombia, país donde se calcula que se generan 700.500 toneladas anuales de envases y empaques plásticos, de los que solo el 30 % se recicla y el 3 % se transforma en nuevos empaques, es seguir fortaleciendo la normativa nacional, de modo que se promueva no solo la circularidad, sino la eliminación de los plásticos más problemáticos.
Este año, también, hay una alta expectativa por la implementación de la ley contra los plásticos de un solo uso, reglamentada, a través del Decreto 2192 del 2023, por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible. Entre otras disposiciones, esta ley establece la prohibición en el ingreso de plásticos de un solo uso a sistemas nacionales de áreas protegidas, incluyendo a los humedales clasificados como sitios Ramsar y otros ambientes frágiles, como los páramos. Se busca, además, la eliminación gradual de plásticos problemáticos de un solo uso, el fortalecimiento de la cadena de valor y la responsabilidad extendida del productor.
5. Aceleración de la transición energética
Durante la más reciente COP28 sobre cambio climático, que se desarrolló en Dubái a finales del año pasado, el presidente Gustavo Petro se adhirió al Tratado de no Proliferación de Combustibles Fósiles, una medida contundente en el camino de la transición energética, que busca poner fin a todas las nuevas exploraciones y su producción de petróleo, carbón y gas natural, eliminando progresivamente la producción y el consumo actual con soluciones rápidas y justas.
En este contexto, es necesario que el país siga tomando medidas para garantizar la expansión de las energías renovables y la descarbonización de su economía, con la mira puesta en el cumplimiento del Acuerdo de París. Este proceso debe hacerse con un bajo impacto en la naturaleza, comprometiendo no solo al Gobierno, sino a las empresas, a los tomadores de decisiones y a toda la población.