
El presidente Gustavo Petro y el encargado de negocios de EE.UU. en Bogotá, John McNamara, conversaron durante actos de la Feria Internacional Aeronáutica y Espacial “F-AIR Colombia 2025”, en Rionegro (Antioquia), el 9 de julio de 2025. Foto: Ovidio González – Presidencia
Sxxi.net – Prensa Presidencia Colombia
En medio de rumores sobre intentos de desestabilizar al Gobierno colombiano desde sectores políticos de derecha, tanto en Colombia como en Estados Unidos, el presidente Gustavo Petro le apostó al diálogo y al respeto mutuo como salida a las diferencias.
Todo empezó a finales de junio con un artículo del diario El País de España, que reveló unos audios del excanciller colombiano Álvaro Leyva quien habría buscado apoyo del presidente Donald Trump para “tumbar a Petro».
La denuncia causó revuelo y tensó las relaciones con Washington. Frente a esa situación, el presidente Petro decidió escribirle directamente a Trump. En su carta, le aclaró que no estaba acusando a nadie sin pruebas, pero sí expresó su preocupación por los riesgos para la democracia colombiana.
“Reconozco que algunas de mis palabras pudieron sonar duras, pero mi intención era alertar sobre posibles planes contra mi gobierno».
Como parte de las tensiones, el Departamento de Estado de EE. UU. llamó a consultas a su encargado de negocios en Bogotá, John McNamara. Como respuesta, la Casa de Nariño hizo lo mismo con el embajador colombiano en Washington, Daniel García-Peña. Después esto se revirtió y los diplomáticos regresaron.
Responsabilidad compartida
El mandatario colombiano ha reiterado que su intención no es confrontar a Estados Unidos, sino poner sobre la mesa una relación más justa y equilibrada.
“Estoy convencido de que el pueblo estadounidense, al igual que el pueblo colombiano, aspira a una relación basada en el respeto mutuo, la soberanía y la justicia. Esto no es un llamado a la confrontación, sino a la responsabilidad compartida», dijo.
Desde Bogotá, el embajador Daniel García-Peña ratificó que el gobierno de Estados Unidos no ha participado en ningún intento de golpe de Estado y que la relación bilateral sigue siendo estratégica. Durante su consulta con el presidente Petro, revisaron los temas más urgentes de la agenda común.
“Hay voluntad de ambos gobiernos para avanzar. La prioridad es fortalecer una cooperación respetuosa y útil para nuestros pueblos», dijo el diplomático colombiano.
La propuesta de Colombia para avanzar en la relación incluye ocho acciones concretas: Primera, lucha contra el crimen organizado transnacional, con mayor articulación entre las fuerzas colombianas y agencias estadounidenses para
desmantelar redes ilegales y sus estructuras financieras.
Segunda, cooperación en seguridad para avanzar en la creación de una fuerza multinacional contra amenazas criminales en la región.
Tercera, política antidrogas, para erradicar al menos 30.000 hectáreas de cultivos de uso ilícito en 2025 mediante aspersión terrestre y programas de sustitución.
Cuarta, Paz total, incluyendo la suspensión de dos extradiciones para facilitar procesos de negociación, sin afectar decisiones judiciales. Podrán revertirse si los implicados incumplen.
Quinta, migración humanitaria, que implica 30 vuelos humanitarios en los cuales se han repatriado a más de 3.100 colombianos. Se busca un acuerdo para intercambiar datos biométricos de migrantes extranjeros.
Sexta, comercio y aranceles. Se gestiona el aplazamiento de nuevas normas en EE. UU. que afectarían a la industria automotriz colombiana.
Séptima, inversión verde. La Plataforma País sigue abierta a empresas estadounidenses que trabajen por energías limpias, infraestructura resiliente y tecnología verde.
Octava, Haití. Colombia ofrece su experiencia en seguridad y cooperación internacional para liderar un enfoque regional que ayude a reconstruir la institucionalidad en ese país.
Apoyo militar y cooperación vigentes
En medio de la tensión, los hechos demuestran que la relación sigue viva. Hace unas semanas en Tolemaida (Tolima) se inauguró una moderna sede de alojamientos en el Centro de Entrenamiento Avanzado de Ala Rotatoria.
La obra, valorada en 5,5 millones de dólares, es la primera de tres edificaciones donadas por Estados Unidos para fortalecer las capacidades de las Fuerzas Armadas para exportar seguridad y promover la estabilidad regional.
En junio, Estados Unidos donó tres embarcaciones patrulleras de largo alcance a la Armada. Según McNamara “esto es una clara demostración del apoyo inquebrantable de EE. UU. al papel de Colombia como líder en seguridad regional.
No solo estamos proporcionando infraestructura, estamos invirtiendo en
el bienestar y la preparación de los valientes hombres y mujeres uniformados de Colombia».
Volando alto
Foto: Presidencia de la República

Transcurrieron 36 años para que un Gobierno renovara la flota aérea del país. La última fue la compra, en el gobierno de Virgilio Barco, de 12 aviones K-Fir C2 y un K-Fir TC2 en 1989. Siempre se dijo, sin confirmarse oficialmente, que estos aviones de combate se compraron de segunda mano a Israel.
En abril de 2025, el presidente Petro anunció la renovación de la flota aérea. En un acto en la Casa de Nariño, junto a la embajadora del Reino de Suecia en Colombia, firmó una carta de intención para la compra de 16 aviones nuevos, los famosos Saab 39 Gripen, de última generación. Hoy el acuerdo está, según el ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez, definido en un 86 por ciento. Solo resta un 14 por ciento, que depende del marco fiscal de mediano plazo.
Así, Colombia cumple el viejo sueño de renovar el equipo de la Fuerza Aeroespacial de Colombia, FAC, con aviones caza que ya tienen países como Hungría, República Checa, Brasil, Sudáfrica y Tailandia.
Esta buena noticia tiene enormes repercusiones nacionales e internacionales. En el campo interno, eleva la moral de la tropa y la autoestima de los colombianos. El país da un salto gigantesco en el cuidado y respeto a su soberanía aérea.
Apenas unos días atrás, y consecuente con la nueva flotilla de aviones, el presidente Petro había anunciado que el Ejército y, en general, las Fuerzas Armadas, comprarán de ahora en adelante su propio armamento sin esperar “regalos» de otros Gobiernos. “Nuestras armas las compramos con el dinero del pueblo colombiano», sostuvo.
La gran paradoja de esta decisión es que un gobierno de izquierda, presidido por un exfirmante de paz, le ha entregado a los hombres y mujeres que integran las Fuerzas Armadas y de Policía, incluidas sus reservas, un sinnúmero de beneficios dirigidos a la dignificación de sus condiciones de vida.
Ha sido el Gobierno del Cambio el que ha garantizado el acceso a los procesos de incorporación a las fuerzas de hombres y mujeres de bajos recursos económicos con matrículas gratuitas para su formación técnica, tecnológica y profesional. Este Gobierno abanderó, además, y logró que se recuperara la famosa mesada 14, que beneficia a más de 200 mil veteranos y sus familias, entre otros beneficios.
Una y otra vez, el presidente Gustavo Petro ha insistido en la necesidad de ampliar los cupos en las universidades para que acojan a los militares de Colombia y se formen profesionalmente en diversas especialidades, como la inteligencia artificial y las matemáticas.
Claro, no podemos dejar de mencionar otro gran anuncio que beneficia a los soldados regulares. A partir del primero de enero de 2026, por primera vez en la historia, comenzarán a recibir un salario mínimo mensual.
Un dato adicional y no menos importante: el Ejército incrementó su pie de fuerza, al pasar de 174.175 efectivos en 2022 a 181.214, en lo que va de 2025. Así las cosas, es evidente que Colombia va volando, que la moral de la tropa es cada día más alta, que a la par con la modernización y el apoyo irrestricto a nuestras Fuerzas Militares y de Policía, está el compromiso de los hombres y mujeres que honran su uniforme y cumplen a cabalidad el juramento a la Constitución, jugándose la vida por defender nuestras fronteras y garantizar la vigencia de la democracia.
Las cifras de los logros en el campo de la defensa son inobjetables. Y todo en un gobierno progresista, demócrata y respetuoso de la Carta Política, que honra la palabra y les cumple a sus ciudadanos.
Le puede interesar
Le puede interesar


CLASIFICADOS

Dejar una contestacion