Cada que se celebra alguna actividad familiar, que se ha convertido en comercial, como es el caso de fin de año, la mayoría cargamos con la preocupación económica de que es necesario regalar algo y esto lo entendemos como una forma de expresar al otro que es importante para nosotros y el regalo tiene el significado de representar estimación o afecto o simplemente un detallito con mucho cariño.
Y claro la actividad económica se incrementa por el intercambio y comercialización, embalaje empaque y transporte de los productos que serán objeto de regalo consumo. No estamos hablando solo de la línea de alimentos y bebidas sino de una cantidad de productos importados, la mayoría del comercio asiático que inunda nuestros mercados de fin de año, con el consecuente aumento de desechos que no sabemos qué hacer con ellos, empezando por el plástico
Son necesarios esos bienes de consumo manufacturados al otro lado del mundo con mano de obra barata y que solo contribuyen pasadas unas horas o días a aumentar los desechos en cada vivienda?
Es necesario comprar ropa hecha asiática, cuando tenemos nuestras propias empresas de ropa y de zapatos contribuyendo de paso al crecimiento de una economía nativa?
Es necesario que consumamos zapatillas o demás accesorios de marca solo por que pagan más publicidad o por que las usa un estrella de cine o deporte?
Requerimos comprar juguetes o chucherías cuando tenemos a la mano tantas opciones para demostrar afecto, compañía y educar también con lo que nuestros artesanos o empresas producen?
Necesitamos alimentar un comercio injusto con el comprador y contaminante con el planeta?
Debemos importar alimentos extranjeros cuando tenemos campo y labriegos que claman para que se consuman sus productos y les paguemos mejor por su dedicación y esfuerzo?
Regalando cosas materiales demostramos que amamos?
La obselencia programada, la elaboración de un producto para que dure determinadas horas, kilómetros o uso, es justo con el consumidor?
El replanteamiento tiene que ver con el impacto en el calentamiento global, dado que en la medida que se requiere más productos se debe extraer más recursos naturales de donde se obtienen las materias primas, siendo que mucho de esos recursos no son renovables y aumentan la quema de combustibles fósiles, adicional a ello muchos contienen sustancias químicas perjudiciales, para nosotros y para el ciclo del agua, la cual en la mayoría de corrientes de agua dulce están contaminadas, lo mismo que playas y costas, igual que los animales que viven en esos ecosistemas.
Antes de consumir o comprar algo piense si es bueno para usted o la persona a quien llega. Si es bueno para el ambiente y para el planeta, si es parte de un comercio justo, si estimula la economía local, regional o nacional. Solo en esa perspectiva puede haber futuro con opciones de vida en este planeta y no solo pensando que como yo no voy a estar que importa. En fin, de año mi detallito es una invitación a consumir menos y cuidar más.
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