El equipo ‘xeneize’ con 3 colombianos en su nómina, se alzó con el título.
Tensión hasta el final se vivió en Argentina, debido a que en la última fecha del torneo se definía el campeón. Únicamente dos equipos peleaban por el primer puesto, Boca Juniors y River Plate.
El día comenzó con River Plate en primer lugar, con la obligación de ir a ganar como visitante, si quería depender de sí mismo, y con un punto más que su eterno rival, Su contrincante, Atlético Tucumán, equipo que aunque no estaba peleando por nada, suele complicar. El partido no podía comenzar de peor forma para el combinado del ‘Muñeco Gallardo’ pues a los 10 minutos del primer tiempo le anularon un gol legítimo al colombiano Borré y 9 minutos más tarde el equipo local se adelantaba en el marcador por cuenta de Toledo. Sin embargo, la alegría no duraría mucho, pues a los 35’ Matías Suárez pondría la paridad en el marcador. Con ese resultado y mientras Boca no ganara, River sería el campeón.
Mientras tanto, en la Bombonera, el ambiente era sin igual, como siempre el jugador número 12 (la hinchada) se hacía presente. Pero esto no era todo, Diego Armando Maradona, máximo ídolo del cuadro ‘xeneize’ volvía a la que una vez fue su casa, pero esta vez, como técnico del equipo rival, Gimnasia y Esgrima de la Plata. El primer tiempo, fue un monólogo del Boca, que intentó reiteradamemte pero no pudo abrir el marcador. Como era de esperarse en ambos estadios, todos pendientes del resultado.
Los minutos transcurrían en ambos encuentros y el marcador no se movía. Comenzando el segundo tiempo, en Tucumán se generaba polémica debido a un penal no sancionado a favor de River Plate, cuando Nacho Fernández cayó en el área, atropellado por un defensa contrario. Minutos más tarde, Gallardo repetía un movimiento estratégico que había utilizado la fecha anterior, incluyendo a Juan Fernando Quintero desde el minuto 63 para hacerse cargo del equipo buscando generar mejores opciones de juego, movimiento acertado, pero a pesar de que el colombiano creó varias opciones, sus compañeros no supieron concretar.
Para tristeza de la hinchada millonaria, Boca se acercaba cada vez más al arco rival y al minuto 72 los avances darían frutos. La jugada la empezó Frank Fabra haciendo una pared que abrió el espacio en la defensa rival, luego hizo un pase a Ramón Ábila al borde del área, quien alcanzó a puntear el balón para dejar a Tévez en la media luna, y este, con un fuerte disparo logró vencer al portero de Gimnasia. Entonces se desató la euforia en La Bombonera, pues sabían que River estaba empatando, y con ese resultado y a falta de solo 18 minutos eran campeones.
Al enterarse de esto, River cambió por completo su plan de juego, que se volvió totalmente vertical, con pelotazos, para buscar directamente a los delanteros. Desafortunadamente el tiempo no fue suficiente para lograr el gol del campeonato y Boca se quedó con el título.
Ahora bien, es necesario resaltar la labor de Miguel Ángel Russo, pues asumió la cabeza del equipo ‘xeneize’ después de superar dos problemas graves de salud que casi lo alejan del fútbol por completo. Además, dió un giro radical al equipo al incluir a los colombianos Frank Fabra, Jorman Campuzano y Sebastian Villa en el once titular que habían sido borrados por el técnico anterior, Gustavo Alfaro; y no solo respondieron, sino que fueron figuras y jugadores indiscutibles dentro del planteamiento del argentino. Así mismo, notable labor la del equipo de Gallardo, que aunque perdió el torneo con dos empates en las dos últimas fechas, realizó una gran trabajo. Al momento, es el único título que aún no consigue Gallardo como técnico del cuadro Millonario. Finalmente, mención especial para el colombiano Rafael Santos Borré, quien terminó como goleador del torneo con 12 goles en 19 partidos.