Para llegar a esta singular región, en donde se encuentra una de las más importantes represas del país que toma su nombre, se toma por la Calle 85 de Bogotá rumbo a La Calera, luego se llega a Guasca y Gachetá, para seguir hacia Gama o Ubalá, y por cualquiera de estos municipios arrima a Gachalá.
El recorrido está lleno de verdes espectaculares con ondulaciones de bosques, sembrados y potreros, en donde se destaca la imagen de laboriosidad de los habitantes del territorio, expresada en los colores de cultivos que van llevando al visitante con admiración por la riqueza y biodiversidad de la región del Guavio.
Cuando se arriba a Gachalá ya se ha bordeado la represa del Guavio que impresiona por la cantidad de agua sostenida entre estas montañas y su rebosadero, característica que hizo visualizar esta región como punto de generación de electricidad desde 1930, por su conformación geológica y la abundancia del preciado líquido.
La central hidroeléctrica o casa de máquinas es subterránea y está ubicada en Mambita, inspección del municipio de Ubalá, entró en funcionamiento el 15 de diciembre de 1992; beneficia de manera directa a Ubalá, Gachalá, Gachetá, Gama, Junín y Guasca por el desarrollo de actividades de pesca y turismo.
Por su parte, la presa está ubicada en la cabecera municipal de Gachalá, y en ella se represan las aguas del rio Guavio, Batatas y Chivor. La región es diversa en bosques, con fauna y flora por descubrir y cuenta con vigilancia y acompañamiento continuo de la Corporación del Guavio.
En cualquiera de los municipios, el visitante encuentra sitios sorprendentes, senderos para recorrer, emprendimientos verdes que ofrecen servicios y productos de la región, transversalizados por una política regional integrada en torno al agua y a la cultura Muisca, dos ejes sobre los que se centra el desarrollo y los procesos adelantados por CorpoGuavio y otras entidades territoriales que orientan sus esfuerzos a acompañar los emprendimientos turísticos, al desarrollo de procesos educativos, asistencia técnica, fomento de la asociatividad, actividades de promoción, seguimiento y mejora continua para que la actividad económica tenga sello de calidad y sostenibilidad.
En el Guavio, el proyecto estratégico Regional Ruta del Agua hacia el Corazón de la Cultura Muisca es la marca que da a conocer la región, la riqueza natural y cultural de los municipios que integran la jurisdicción de esta bella zona del oriente cundinamarqués.
El Guavio es también provincia y los ecosistemas que lo conforman contienen reservas forestales e hídricas como la Balsa de Junín, los ríos Gachetá, Moquentiva, Chorreras y Concepción, el embalse de San Rafael y El Sapo en La Calera, el río Sucio en Gachalá, el Parque Nacional Natural Chingaza (declarado patrimonio hídrico de la humanidad con el título de Humedales Ramsar – y que surte de agua a Bogotá), la Central Hidoreléctrica del Guavio, las lagunas de Siecha, Guasca, y el embalse de Tominé en Guatavita.
La región es un paraíso y el banquete no es solo de paisaje, sino de una gastronomía exquisita que, desde la abundancia pesquera, por la trucha del embalse y las viandas típicas, se encuentra por todo lado, y siempre un agua de panela con queso está a la orden por la exuberante oferta lechera.
El Guavio limita con los ecosistemas que suben de los Llanos Orientales y la Amazonia en los que confluyen especies migratorias, especialmente aves, condición que favorece el desarrollo de actividades de avistamiento y el estudio de estas maravillosas especies que amplían la riqueza natural de la región.
La riqueza natural colombiana instalada en El Guavio debe admirarse, cuidarse, protegerse y trabajar para que los organismos públicos y privados a cargo del tema, hagan inversiones para su mejoramiento y sostenibilidad.
Cuando pueda visite El Guavio, ese hermoso paraíso que no está en Suiza, Suecia o Dinamarca, sino en Cundinamarca Colombia.
Le puede interesar: